Cuando las serpientes cautivas se niegan a comer.

Cada vez más personas adoptan serpientes como animales domésticos. Las consultas más frecuentes al veterinario tienen que ver con sus problemas de alimentación.

Muchos clientes visitan al veterinario con sus serpientes alarmados por las dificultades que presentan en su alimentación. La mayoría de las veces no existe ningún problema, sino desconocimiento por parte del dueño de las pautas habituales de alimentación de estos animales. Al tratarse de animales de sangre fría, su metabolismo varía bastante según las condiciones ambientales, lo que influye en la frecuencia con que deben alimentarse.

Es imprescindible que el dueño conozca de que especie es exactamente su mascota: muchas serpientes no se alimentan en absoluto durante las temporadas de muda o de reproducción.

Una vez que se descarta la presencia de enfermedades específicas que hagan disminuir o desaparecer el apetito del animal, podemos considerar otras causas por las que la serpiente no coma.

• La temperatura ambiente, la humedad y la iluminación del terrario son fundamentales. Si no son las adecuadas para esa especie concreta, pueden provocar anorexia y llevar al animal a enfermar.
• Otro punto muy importante es la clase de alimentos que se les da. La mayoría de las serpientes prefieren presas vivas, y el problema puede estar en que siempre se les ofrece el mismo tipo de presas, aquellas más fáciles de conseguir. Una alimentación monótona puede hacer que el animal pierda el interés por la comida. Es posible acostumbrarlas a aceptar presas muertas o aturdidas (con lo cual evitaremos que estas ataquen a la serpiente o se defiendan causándole lesiones que en el futuro le hagan rechazarlas como alimento).
• Debemos prestar atención también a las mudas, durante las cuales normalmente la serpiente no se alimenta. Si se producen demasiado a menudo (por ejemplo por un hipertiroidismo), serán mas las ocasiones en las que el animal dejará de comer.
• Si durante la muda no se desprende correctamente el espéculo corneal (una especie de lente que protege al ojo, pues las serpientes carecen de párpados) se producirán dificultades en la visión con los consiguientes problemas para comer.
• La ausencia de decoración en el terrario puede llevar a los animales nerviosos a dejar de comer por la inseguridad que les crea el no tener escondites en los que se sientan seguros.
• Por último, existe una anorexia que llamamos fisiológica que es la que se produce en aquellos animales que hibernan: al bajar la temperatura entran en una especie de letargo que dura meses, durante el cual no se alimentarán. Solo debe de preocuparnos si la serpiente no estaba en buenas condiciones antes de aletargarse, pues pueden aparecer otras enfermedades después del letargo o no poder salir de él por pura debilidad.