¿Qué
es la lesmaniosis?
Se
trata de una enfermedad producida por un parasito (Leishmania infantum)
que afecta a diversas especies, pero principalmente al perro en nuestra
area geográfica. La comarca del Bierzo es una zona endémica, es decir, la enfermedad está establecida aquí de forma permanente y el riesgo de contagio es alto para nuestros perros. No es una enfermadad nueva: El primer caso descrito
en perros data de 1808, y en España se localizó ya en 1810.
¿Que
síntomas produce?
La
gran diferencia entre unos perros y otros en cuanto a sus manifestaciones
clínicas explica por que esta enfermedad es difícil de diagnosticar.
En general se reconocen dos formas:
-
Lesmaniosis
cutánea,
caracterizada sobre todo por problemas en la piel: pérdida
de pelo, descamaciones, infecciones de piel que se curan aparentemente
pero vuelven a aparecer una y otra vez. Es muy característica
(aunque no siempre se presenta) la pérdida de pelo en la cara
y alrededor de los ojos, como si fuera un "antifaz".
-
Lesmaniosis
visceral:
afecta sobre todo a organos internos: riñón, bazo, huesos,
etc, con gran variedad de síntomas dependiendo de los órganos
afectados. Es de evolución más grave y rápida.
El animal va perdiendo peso a pesar de comer con apetito. En casos
muy avanzados son típicas las hemorragias nasales y el crecimiento
exagerado de las uñas.
En
la práctica se presentan casos intermedios entre las dos formas,
y se conocen también casos de perros que se contagian y se llegan
a curar sin presentar síntomas.
Algunos
perros pueden tardar hasta cuatro años en manifestar signos de
enfermedad desde que se contagian, pero durante este tiempo pueden transmitir
la enfermedad a otros animales a pesar de estar aparentemente sanos.
¿Puede
trasmitirse a las personas?
Existe
la posibilidad de trasmision a las personas, pero la enfermedad solo se
presenta en casos muy determinados: personas inmunodeprimidas (con menos
defensas frente a las enfermedades). En nuestro país solo se han
descrito casos de lesmaniosis humana en enfermos de SIDA, aunque se pueden
considerar como grupos de riesgo aquellas personas que tienen comprometido
su sistema inmunitario: Quienes toman tratamientos inmunosupresores tras
un trasplante, cancer, enfermos de sida, etcétera. En todo caso,
es imposible contraer directamente la enfermedad por contacto con un perro
enfermo: el contagio siempre se produce por picadura de mosquito.
¿Como
se contrae la enfermedad?
Exclusivamente
por picadura de mosquito. No existe posibilidad de contagio
directo de un perro a otro o de un perro a una persona. Tampoco pueden
transmitirla otros insectos picadores como las pulgas o garrapatas. Solo
la trasmiten las hembras del género Phlebotomus.
¿Se
puede curar?
Por
desgracia no existe un tratamiento que elimine totalmente la enfermedad.
De los perros contagiados, un 15% se curan espontáneamente sin
necesidad de tratamiento. Entre los que enferman, solo un 20% (uno de
cada cinco) de los tratados correctamente conseguían curarse por completo hasta ahora, aunque con los últimos protocolos de tratamiento estamos consiguendo mejores resultados.
El resto serán portadores de la enfermedad y estarán expuestos
a recaidas.
El
tratamiento, no obstante, consigue mejorar su estado de salud y alargar
su vida considerablemente, siempre que se aplique al comienzo de la
enfermedad, pudiendo llegar a hacer una vida prácticamente normal.En
casos muy avanzados no se recomienda el tratamiento, pues no será
de ninguna utilidad.
Tampoco se recomienda tratar aquellos perros que vivan con otros perros
a los que pueden contagiar ni los perros de trabajo (perros de caza),
ya que los esfuerzos que supone una actividad como la caza les debilitarán
mucho y harán que recaigan de nuevo. En todos estos casos es
recomendable el sacrificio del animal con el fín de no prolongar
su sufrimiento y evitar nuevos contagios.
Resumiendo:
solo es recomendable tratar perros con buen estado general de salud,
que vivan solos y que no se vayan a someter en el futuro a grandes esfuerzos.
Entre los perros de compañia es en donde mejores resultados da
el tratamiento.
¿Se
puede prevenir?
¡Al fín disponemos de una vacuna eficaz contra esta terrible enfermedad! Después de más de 20 años de investigaciones y a pesar de numerosas dificultades técnicas, al fín se ha conseguido desarrollar mediante técnicas de vanguardia una vacuna contra la leishmaniosis canina en Europa.
Hasta ahora, las únicas
medidas individuales de prevención útiles consistían en impedir
la picadura del mosquito: Evitar los paseos al anochecer por zonas
con mosquitos, uso de lociones repelentes e insecticidas sobre el perro, collares repelentes de poca o nula eficacia....Pero ahora ya podemos vacunar a nuestros perros para desarrollen defensas que les protejan.
Se puede vacunar cualquier perro sano de más de seis meses de edad que no haya sido ya contagiado. Puesto que a veces los síntomas de la enfermedad tardan meses en aparecer tras la picadura, antes de vacunar al perro se le debe hacer un análisis de sangre para comprobar que no está infectado. Este análisis se lo hacemos en nuestra consulta en el momento.
Es importante tener en cuenta que debido a las peculiaridades del parásito causante de esta enfermedad, no todos los perros vacunados se inmunizan totalmente: un 25 % de los perros vacunados no responden adecuadamente y pueden llegar a desarrollar la enfermedad, aunque en estos casos esta suele ser mas leve y mas facil de tratar con éxito.
En todo caso el 75 % de los perros vacunados quedan cortrectamente protejidos, por lo que creemos que la vacunación es altamente recomendable para controlar esta enfermedad.
Tengo
un perro en casa y no presenta síntomas. ¿Como puedo saber
si se ha contagiado?
La
infección es fácil de detectar ya en sus fases tempranas
mediante un simple análisis de sangre. En nuestra clínica
te podemos dar los resultados en 15 minutos.
¿En
qué casos se debe pedir un análisis?
Aparte
de los animales enfermos, a los que ya se les hace un análisis
de rutina cuando se sospecha que se puede tratar de Lesmaniosis, es recomendable
hacerlo en aquellos perros aparentemente sanos que viven en zonas donde
hay tasas altas de contagio o que han convivido con otros animales infectados. Cuanto antes se detecta la enfermedad, más posibilidades de
éxito tendrá el tratamiento.
Y por supuesto, antes de la primera vacunación.
¿Cuando
debo pedir un análisis para mi perro?
Puesto
que el contagio se produce únicamente en los meses de verano, los
perros infectados ya presentan anticuerpos en su sangre uno o dos meses
después. A partir del mes de Noviembre o Diciembre ya se puede
saber con seguridad si el animal está infectado o no, y en caso
de ser positivo el resultado, empezar el tratamiento cuanto antes, o si es negativo, poder aplicarle la vacuna.
RECUERDA:
Nuestra comarca es una zona de numerosos ríos y vegetación que favorecen le
reproducción de los mosquitos. Además tenemos una gran población
de perros sin control sanitario alguno en los pueblos que actúa
como reservorio de la enfermedad: perros que nunca son controlados por
ningún veterinario y que, cuando enferman, sus propietarios ni
siquiera se preocupan de saber lo que les pasa. Estos animales pueden
permanecer varios años infectando a otros perros, incluso sin tener
contacto con ellos. El agente trasmisor es el mosquito y este puede
desplazarse en un radio de un kilómetro aproximadamente infectando
todos perros a los que pica. Por ello, la Lesmaniosis es una enfermedad
endémica en el Bierzo, es decir, que existe riesgo de contagio
todos los años. Se da el caso de algunas poblaciones en las que
todos los perros que vienen a nuestra consulta dan resultado positivo
al análisis.
Los
propietarios responsables de sus perros tienen la posibilidad de actuar
a tiempo mediante la vacunación de los animales sanos, o la detección precoz de la enfermedad en los que ya se han contagiado, cuando
existen mas posiblidades de tratamiento, con un sencillo análisis
de sangre que se realiza sin causarle ningún sufrimiento al animal.
|